Clima

El territorio del Ribeiro, alejado del influjo atlántico, tiene una de las pluviosidades más bajas de Galicia y su amplitud térmica puede llegar a los 50º C. La fosa geológica en la que se encuentra la comarca hace que en verano se alcancen temperaturas máximas altas y en invierno se formen nieblas y heladas por estancamiento y decantación del aire frío en los valles y hondonadas, teniendo un promedio superior a los 30 días de heladas al año.
El peculiar clima se ve favorecido por las barreras naturales. El macizo montañoso con orientación norte-sur que protege la comarca del Ribeiro está formado por la sierra de O Suido y la de O Faro de Avión.  Algo más al norte por la sierra do Testeiro y al sur por la sierra de Leboreiro, que protegen el territorio de borrascas subatlánticas y proporcionan un ecoclima de transición oceánico-mediterráneo. Su situación meridional en Galicia favorece la sequedad y las temperaturas templadas de 14.5 ºC de media anual. Con características intermedias entre los climas oceánico y mediterráneo permite que los frutos de las viñas consigan una madurez fenológica perfecta, conservando aroma y acidez.
Con una pluviometría media de 950 mm, pero con características que manifiesta su tendencia mediterránea al contar por lo menos con tres meses en los que las precipitaciones en mm son inferiores dos veces a la temperatura media mensual correspondiente.
La insolación cuenta con un total anual de 1915 horas con un máximo (para el periodo de julio y agosto) del 40 % y un mínimo (para diciembre y enero) del 8 %.