Suelos


Los suelos de la zona son de origen granítico o esquistoso. Existiendo la mezcla de ambos en distintas proporciones. Dando lugar a principalmente a tres tipos de suelos bien diferenciados.

Arcillas 

Provenientes de la erosión y degradación de las laderas de Xistos. Formando amplias zonas sedimentarias que generalmente se encuentran en la zona del Avia y Miño. Dan vinos maduros, concentrados, con mucho cuerpo y longevos.


Arenas 

Provenientes de la degradación de los  bolos o peñascos y la roca madre de origen granítico. Roca ígnea plutónica constituida esencialmente por cuarzo, feldespato y mica. Se producen al solidificarse lentamente magma con alto contenido en sílice en profundidades a alta presión.
Los vinos de suelos arenosos son sutiles, intensos y fragantes. Pero su estructura es fina y delicada, la longevidad es algo menor que en los otros suelos.


Xistos

La mayoría de los esquistos proceden del metamorfismo de arcillas y lodos, metamorfizados, de principios del Mesozoico, del Paleozoico e incluso del Precámbrico.  Junto con las pizarras y filitas * como rocas intermedias. Rocas metamórficas con estructura laminar ondulada e irregular (estructura esquistosa), con granos minerales observables a simple vista. Existen distintos tipos de esquisto en función de su composición mineralógica:  micaesquisto, micacita,. cuarzoesquisto, etc.

*Las filitas representan una transición en el grado de metamorfismo entre la pizarra y el esquisto. Sus minerales son más grandes que los de la pizarra, pero no lo bastante como para ser tácilmente identificables a simple vista. Aunque la filita parece similar a la pizarra, puede distinguirse con facilidad por su brillo satinado y su superficie ondulada.
Los vinos de xistos son vinos frescos, personales e intensos, generalmente marcados por las notas de suelo, recuerdos de fosforo, tiza, pizarra mojada, etc.